José Coronado, Goya al mejor actor

Play

José Coronado / EFE

José Coronado ha recibido el premio Goya a la mejor interpretación masculina protagonista por su trabajo en la película "No habrá paz para los malvados", dirigida por Enrique Urbizu, durante la XXVI edición de estos galardones, en la que se impuso a Antonio Banderas, Daniel Brühl y Luis Tosar.

Coronado dedicó el premio al equipo de la película, a los otros actores nominados, a su familia, amigos y, especialmente, a sus hijos Nicolás y Candela.

"Gracias por este premio", afirmó un sonriente Coronado, que ha conseguido el Goya al tercer intento tras las nominaciones conseguidas por "Goya en Burdeos" (1999) y "La caja 507" (2002).

"Hemos tenido una cosecha estupenda", resaltó el actor madrileño, que ha agradecido a los académicos por haber considerado que su trabajo "es digno de este honor".

Ya también tuvo palabras de agradecimiento para el equipo técnico de la película -"todos han hecho bien su trabajo y por eso yo puedo recoger esto"- y, por su puesto, "al capitán del barco, Urbizu: gracias por tu compromiso y aportación al cine español y por tu amistad".

Coronado, que interpreta en el filme de Urbizu a un policía heterodoxo, se hizo actor a los veintinueve años, después de estudiar dos años de Medicina y cuatro de Derecho, crear una agencia de modelos, más tarde una de viajes y, finalmente un restaurante.

Un pequeño papel en la obra de teatro "El público", de Federico García Lorca, le sirvió para darse a conocer, aunque se hizo un hueco privilegiado en el mundo de la interpretación con la serie de televisión "Brigada central"(1989) y las películas "Yo soy esa" (1990) de Luis Sanz y "Salsa rosa" (1991) de Gómez Pereira.

Sus dos primeros trabajos en el cine fueron "Jarrapellejos" (1987), de Antonio Jiménez Rico, y "Berlín Blues" (1988), de Ricardo Franco, conseguidos al no poder interpretarlos Miguel Bosé; y posteriormente realizó series de televisión como "El teniente Lorena" (1991) o "Hermanos de leche".

Presentó concursos como "El Gordo" y "La noche prohibida" y fue el famoso burlador Don Juan Tenorio en la serie de televisión dirigida por Berlanga en 1997.

En 1998, dio vida a Goya en la película de Carlos Saura "Goya en Burdeos", con la que fue candidato al Goya 1999 a la mejor interpretación masculina de reparto, y al año siguiente realizó una colaboración especial en "Cascabel", de Daniel Cebrián.

Posteriormente, y a las órdenes de Enrique Urbizu, protagonizó, junto a Antonio Resines, "La caja 507"(2001), película con la que fue de nuevo candidato al Goya 2002, en la categoría de mejor actor de reparto.

Sus más recientes interpretaciones en la gran pantalla han sido "Todos amamos a Gloria Cole" (2007), de Manuel Lombardero, y "Todos estamos invitados" (2007), de Manuel Gutiérrez Aragón, un filme que retrata la vida vista desde el miedo de aquellos que están amenazados por la banda terrorista ETA a través de una historia basada en hechos reales.