El cineasta sevillano Benito Zambrano regresó el año pasado a las pantallas tras seis años de silencio con ‘La voz dormida’, película sobre la posguerra española que opta a una decena de galardones en la próxima edición de los Premios Goya.
“La gala de los Goya es importante para el cine español, es la manera más potente de promocionar el cine”, reconoce el director de ‘Solas’, película que fue una de las sorpresas de la gala del año 2000, en la charla que ha mantenido con nuestros lectores.
Zambrano ha destacado la labor de los actores en su film. “Me siento muy satisfecho porque todos han hecho un gran trabajo, especialmente ellas. En la película dedicamos mucho tiempo al casting porque los actores son el 50% del éxito de la película y es importante encontrar la persona adecuada”.
La recompensa: nominaciones para María León, Inma Cuesta y Ana Wagener, protagonistas de la cinta, y para Marc Clotet, al mejor actor revelación. “A María la definiría con vitalidad, divertida. Inma es coherencia. A Marc le definiría como ternura.. y a Daniel (Holguín) como la fuerza”, ha comentado el director.
Respecto a la situación del cine español, Zambrano ha reconocido que “lo tiene difícil porque tenemos que competir con una industria muy potente que es la americana. Para que las películas tengan calidad y sean competitivas hace falta dinero”.
En este sentido, considera claves las subvenciones. “La cultura hay que apoyarla. Una subvención no se la lleva el director, sirve para una película que da muchos puestos de trabajo. La cultura no es un capricho es una necesidad de un país que hay que apoyar”.