Los Premios del Sindicato de Actores optaron este sábado por la diversidad étnica en su gala de este año en contraposición a las recientes nominaciones a los Oscar, donde todos los candidatos a Mejor actor son blancos. El Sindicato ha premiado a cuatro actores negros: Idris Elba (ganador de dos premios), Viola Davis, Uzo Aduba y Queen Latifah.
"Damas y caballeros, bienvenidos a la diversidad televisiva", anunció Elba a la hora de presentar un premio tras recibir Davis la estatuilla. El actor británico se hizo con el galardón tanto por su papel secundario en el drama Beasts of No Nation, como por su papel en la ficción televisiva de la BBC Lutero.
En la categoría a Mejor reparto (el equivalente a Mejor película en los Oscar) fue para Spotlight, la película sobre los reporteros del Boston Globe que destaparon una serie de abusos sexuales llevados a cabo los curas de Massachussets, basada en hechos reales.
Michael Keaton le dedicó el premio a "los marginados de todo el mundo. A todos los Flint y a todos los Michigan. A los desfavorecidos y a los débiles", y añadió que lo sucedido "ni es justo ni es injusto" y que él "siempre va a votar a los buenos". Sin embargo, su rival en los Oscar, La gran apuesta, sigue siendo la gran favorita, ya que se hizo con el premio del Gremio de Productores, un buen indicativo de lo que puede suceder en los Oscar.
También fue una gran noche para los actores británicos, y no sólo por los galardones entregados a Elba. Los actores de la serie Downton Abbey fueron múltiples veces premiados como Mejor drama televisivo.
La australiana Ruby Rose ganó un galardón por Orange is the New Black, y Mad Max: Furia en la carretera se hizo con la estatuilla por Mejor conjunto de especialistas.
Por su parte Leonardo DiCaprio se hizo con el premio a Mejor actor por El Renacido, un premio que ya se suma al Globo de Oro ganado a principios de mes. El actor se postula como el favorito para llevarse el Oscar con lo que él mismo define como una película de "arte y ensayo épico", pese a que no sería la primera vez que Leonardo se queda a las puertas del prestigiado galardón. Mientras, Brie Larson ("Room") se hizo con el galardón cinematográfico a mejor actriz.
Los premios en televisión fueron dominados por Netflix y su Orange is the New Black, obteniendo dos premios, y por Jeffrey Tambor, que recibió el premio a Mejor actor de comedia televisiva por su papel como transexual en la serie Transparent, producida por Amazon Studios. Tambor dedicó su premio a las personas transgénero que no tienen el dinero y los privilegios de su personaje. "Para su operaciones, para sus medicamentos, por su libertad", dijo el actor al recoger la estatuilla.
Viola Davis, quien ganó el premio a Mejor actriz de televisión en drama, protagonizó con su discurso el momento más polémico de la noche. "La gente siempre dice 'Guau, Annalise es un antihéroe. ¿No te preocupa que sea desagradable? ¿No te preocupa que no sea un ejemplo a seguir?", dijo refiriéndose a su personaje en Cómo defender a un asesino para después añadir lo siguiente: "cuando oigo cosa así siempre pienso '¿Por qué debería ser un héroe? ¿Por qué debería ser un ejemplo a seguir?' Mi trabajo como actriz es crear mi personaje lo mejor que pueda, humanizarlo. Defectuosa, sucia, tal vez no siempre sea agradable. Quizá no sea bonito. Pero es mi trabajo y lo hago lo mejor que sé".
Por su parte Alicia Vikander, que recibió una estatuilla por un papel de reparto en The Danish Girl, dedicó su premio a la comunidad transgénero en un
