Es uno de los máximos iconos en toda gala de premios que se precie. La alfombra roja es un referente, una seña de identidad, sobre todo en el mundillo del cine, aunque para saber de sus orígenes hay que echar la vista bastante más atrás.
Los primeros vestigios de la existencia de la famosa alfombra roja vienen de la época antigua, en concreto del año 458 A.C. La tragedia griega ‘Agamenón’ de Esquilo hace referencia a este objeto tan usual en nuestra época. Según el relato, cuando Agamenón llega vencedor de Troya su esposa, Clitemnestra, le ofrece caminar por una alfombra roja, algo a lo que el distinguido héroe se niega por ser un lujo que solo se podían permitir los dioses.
Ya entrado el siglo XX, la compañía ferroviaria 20th Century Limited, inaugurada en 1902 y que era utilizada por las personalidades más exclusivas de la época, instaló una alfombra roja por la que los viajeros iban desde el tren hasta el vestíbulo.
Su uso en el mundo del cine llegaría en los años 40 del siglo pasado, aunque en 1922 se instalara por primera vez a las puertas del Egyptian Theater de Los Ángeles con motivo de la inauguración.
La alfombra roja de los Premios Oscars
Hasta el momento se le dio un uso ceremonial, para certámenes políticos, por ejemplo. Pero fue en 1961 cuando llegó oficialmente a los Premios Oscars de Hollywood. Aun así, no se convirtió en el icono y referente para artistas y público que es hoy en día hasta cinco años después, cuando se comercializaron las primeras televisiones en color.
Actualmente, ya es un referente en el mundo de la moda y de estilo en todas las celebraciones, donde actores y actrices pasean sus ‘looks’ y el público se mantiene atento a los mejores vestidos o los peores ‘looks’ que se ven en ella.
